A cualquier modelo de negocio se le puede dar una vuelta de tuerca. La mayor dificultad es que pensar en el cambio nos produce vértigo y parálisis, no sabemos por dónde empezar. No se trata de ser temerarios sino de descubrir juntos una oportunidad que muchas veces no se ve a simple vista, sino que hay que profundizar en las ideas inconexas que nos vienen a la mente en el día a día y abrirse a explorarlas. Todo lo que tengas ahora mismo en la cabeza, puede pasar de ser un problema a ser una satisfacción.